Saber cómo abonar la tierra para sembrar es fundamental para obtener buenos resultados en tus cultivos. El abonado es una tarea necesaria antes de la siembra independientemente de cómo sea la tierra o de qué quieras cultivar. Conocer cómo enriquecer la tierra para sembrar te permitirá maximizar el rendimiento de tu huerto, jardín o invernadero.
Abonar consiste en aportar al suelo materia orgánica para enriquecerlo y es uno de los últimos puntos que llevamos a cabo cuando preparamos la tierra para sembrar. Se trata de una acción tan importante y fundamental en agricultura como eliminar las malas hierbas, airear la tierra o allanar el terreno.
Como expertos en invernaderos, desde Sistemas Hortícolas Almería te damos todo tipo de consejos para sacarle el máximo rendimiento a tus cultivos. En este artículo te explicamos cómo abonar la tierra para sembrar repasando cuáles son los mejores fertilizantes orgánicos para tu huerto, jardín o invernadero. También te contamos cuáles son todos los pasos a seguir para abonar la tierra y repasamos rápidamente en qué consisten el resto de labores fundamentales para preparar la tierra para sembrar.
¡Sigue leyendo para descubrir todas las claves para preparar la tierra antes de la siembra!

¿Qué es Abonar en Agricultura?
Antes de profundizar en como fertilizar la tierra, es importante entender qué es abonar en agricultura. El abonado es el proceso mediante el cual se incorporan nutrientes al suelo para mejorar su fertilidad y capacidad productiva. Esta práctica permite que las plantas dispongan de los elementos esenciales para su crecimiento y desarrollo óptimo.
Cuando hablamos de cómo fertilizar la tierra para sembrar, nos referimos a una técnica agrícola milenaria que busca restaurar y enriquecer el suelo con materia orgánica y nutrientes minerales. El objetivo principal es crear un ambiente favorable para el desarrollo radicular y la absorción de nutrientes por parte de las plantas.
¿Qué se puede usar para Abonar la Tierra?
Antes de ver cómo abonar la tierra para sembrar es importante conocer cuáles son los fertilizantes más eficientes. Existen diferentes tipos de abono para tierra que puedes utilizar según tus necesidades y recursos disponibles.
Nosotros te recomendamos optar por fertilizantes orgánicos ya que cuentan con la ventaja de permitirte aprovechar los residuos orgánicos y aumentar la actividad microbiana del suelo. También sirven para recuperar la materia orgánica del suelo, favoreciendo la retención de nutrientes.
Fertilizantes Orgánicos Principales
Estos son algunos de los fertilizantes orgánicos más eficientes que puedes utilizar como abono para la tierra en tu invernadero, huerto o jardín:
Estiércol: Es uno de los fertilizantes orgánicos más económicos y puede utilizarse directamente en la tierra. Puedes comprarlo u obtenerlo de los animales si tienes ganado. Este abono tierra es especialmente rico en nitrógeno y mejora la estructura del suelo.
Humus de lombriz: Uno de los mejores abonos para nuestros cultivos que además resulta muy económico porque solo se necesita contar con unas lombrices californianas. Este tipo de abono de tierra es rico en nutrientes y mejora significativamente la retención de agua.
Té de banana: Sirve para aportar potasio a las plantas y es especialmente útil cuando se cultivan hortalizas como las zanahorias o las habas. También es beneficioso durante la época de floración.
Pasto recién cortado: Se descompone rápidamente y permite enriquecer el suelo con sus nutrientes. Para prepararlo tan solo tienes que ir regando los residuos y dejarlo reposar durante unos días.
Compost: Puedes aprovechar los desechos orgánicos que generas en tu hogar para crear un fertilizante casero. Echa un vistazo al artículo en el que te contamos cómo hacer compost.
Cómo Abonar la Tierra de Forma Casera
Para aquellos interesados en cómo abonar la tierra de forma casera, existen múltiples opciones económicas y efectivas:
Compost casero: Utiliza restos de frutas, verduras, cáscaras de huevo y residuos de jardín para crear tu propio abono tierra.
Purín de ortigas: Fermenta hojas de ortiga en agua durante 2-3 semanas para obtener un fertilizante líquido rico en nitrógeno.
Ceniza de madera: Aporta potasio y fósforo, pero úsala con moderación para no alterar el pH del suelo.
Restos de café: Los posos de café son excelentes para acidificar ligeramente el suelo y aportar nitrógeno.
Cuándo Abonar la Tierra: Timing Perfecto
Una pregunta frecuente es cuándo abonar la tierra para obtener los mejores resultados. El momento del abonado es crucial para maximizar la efectividad de los nutrientes.
Cuándo Abonar el Huerto
Aunque puede hacerse durante todo el año, las mejores épocas para abonar la tierra son la primavera y el otoño porque la tierra no está demasiado húmeda pero tampoco excesivamente seca. Concretamente, la mejor estación para abonar la tierra es el otoño; desde principios de septiembre a mediados de octubre.
Otoño (septiembre-octubre): Ideal para abono para tierra de liberación lenta que se descompondrá durante el invierno.
Primavera (marzo-abril): Perfecto para aplicar fertilizantes de acción rápida antes de la temporada de crecimiento.
Verano: Solo para aplicaciones específicas de fertilizantes líquidos en cultivos activos. Durante esta época, es importante proteger las plantas del exceso de calor, por lo que una malla de sombreo reduce el impacto solar eficazmente mientras permites continuar con el programa de fertilización.
Invierno: Generalmente se evita, excepto en climas cálidos donde la actividad de las plantas continúa.
Abonar Antes o Después de Sembrar: ¿Cuál es Mejor?
Una duda común es si es mejor abonar antes o después de sembrar. La respuesta depende del tipo de abono y cultivo:
Abonar Antes de Sembrar (Recomendado)
Ventajas:
- Permite que los nutrientes se integren al suelo antes de la siembra
- Evita quemar las semillas o raíces jóvenes con fertilizantes concentrados
- Mejora la estructura del suelo antes del cultivo
Tipos de abono recomendados:
- Compost maduro
- Estiércol bien descompuesto
- Humus de lombriz
- Fertilizantes granulados de liberación lenta
Abonar Después de Sembrar
Cuándo es apropiado:
- Para cultivos ya establecidos que necesitan nutrición adicional
- Aplicación de fertilizantes líquidos específicos
- Corrección de deficiencias nutricionales durante el crecimiento
Cómo se Abona la Tierra para Sembrar: Proceso Paso a Paso
El proceso de cómo fertilizar la tierra para el sembrado requiere seguir una secuencia específica para obtener los mejores resultados:
Preparación Previa
Antes de abonar el terreno es importante hacer una buena limpieza del terreno y un labrado para aportar oxigenación al suelo y un drenaje para los excesos de agua. Cuando la tierra esté fina, sin conglomerados y con una textura esponjosa estará lista para ser abonada.
Proceso de Aplicación
- Rastrillar: Uniformiza la superficie del terreno
- Distribuir el abono: Extiende el abono para la tierra de manera uniforme
- Incorporar: Mezcla el abono con la tierra usando un rastrillo o azada
- Regar ligeramente: Ayuda a activar los microorganismos del abono
- Dejar reposar: Permite que el abono tierra se integre durante 1-2 semanas antes de sembrar
Cómo Enriquecer la Tierra para Sembrar: Técnicas Avanzadas
Para obtener resultados excepcionales, es importante conocer técnicas avanzadas sobre cómo enriquecer la tierra para sembrar:
Análisis de Suelo
Antes de aplicar cualquier abono para tierra, realiza un análisis del pH y nutrientes del suelo:
- pH ácido (6.0-6.5): Ideal para cultivos como arándanos y patatas
- pH neutro (6.5-7.0): Perfecto para la mayoría de hortalizas
- pH alcalino (7.0-7.5): Adecuado para cultivos mediterráneos
Rotación de Cultivos y Abonado
Combina la rotación de cultivos con estrategias específicas de abonado:
- Leguminosas: Requieren menos nitrógeno pero aportan al suelo
- Crucíferas: Necesitan suelos ricos en materia orgánica
- Solanáceas: Demandan alto contenido de fósforo y potasio
Cómo Abonar Tierra para Plantas Específicas
Diferentes plantas requieren enfoques específicos de cómo abonar tierra para plantas:
Hortalizas de hoja: Alta demanda de nitrógeno Hortalizas de fruto: Necesitan equilibrio NPK con énfasis en fósforo Plantas aromáticas: Prefieren suelos menos ricos para concentrar aceites esenciales
Cómo Abonar un Terreno Grande: Estrategias Profesionales
Para propiedades extensas, cómo abonar un terreno requiere planificación estratégica:
Zonificación del Terreno
Divide el terreno en zonas según:
- Tipo de cultivo planificado
- Condiciones del suelo existentes
- Acceso a agua y maquinaria
- Exposición solar y drenaje
Maquinaria y Herramientas
Para terrenos grandes considera:
- Esparcidores de abono: Para distribución uniforme
- Cultivadores: Para incorporar el abono al suelo
- Sistemas de riego: Para activar fertilizantes granulados
Además, para optimizar el ambiente de cultivo, una malla para invernadero ofrece una solución completa para tu huerto, proporcionando las condiciones ideales para que los nutrientes aplicados sean aprovechados eficientemente por las plantas.
Abonar el Suelo: Mantenimiento a Largo Plazo
El proceso de abonar el suelo no es una tarea única, sino parte de un programa de mantenimiento continuo:
Programa Anual de Fertilización
Primavera: Aplicación de abono para la tierra con fórmulas balanceadas Verano: Fertilización foliar y aplicaciones específicas Otoño: Incorporación de materia orgánica y abonos de liberación lenta Invierno: Planificación y preparación de materiales para el próximo ciclo
Indicadores de Suelo Saludable
Un suelo bien abonado presenta:
- Color oscuro y aroma a tierra fresca
- Buena estructura y capacidad de retención de agua
- Presencia de lombrices y microorganismos
- pH estable en el rango óptimo para tus cultivos
Cómo Curar la Tierra para Sembrar: Rehabilitación de Suelos
En casos de suelos degradados, es necesario saber cómo curar la tierra para sembrar antes de aplicar técnicas convencionales de abonado:
Diagnóstico de Problemas
Suelos compactados: Requieren aireación mecánica y incorporación de materia orgánica Suelos salinos: Necesitan lavado y aplicación de mejoradores específicos Suelos ácidos: Requieren encalado antes del abonado regular Suelos pobres en materia orgánica: Necesitan aportaciones masivas de compost
Proceso de Rehabilitación
- Corrección del pH: Ajusta a valores óptimos (6.5-7.0)
- Mejora del drenaje: Instala sistemas de drenaje si es necesario
- Aportación masiva de materia orgánica: 5-10 kg/m² durante el primer año
- Siembra de cultivos de cobertura: Leguminosas para fijar nitrógeno
- Rotación planificada: Evita cultivos demandantes durante la rehabilitación
Fertilizar la Tierra para el Sembrado: Consideraciones Especiales
Al fertilizar la tierra para el sembrado, ten en cuenta factores específicos según el tipo de cultivo:
Cultivos de Temporada Corta
Para cultivos de ciclo rápido (30-60 días):
- Utiliza fertilizantes de liberación rápida
- Aplica pequeñas dosis frecuentes
- Prioriza formas disponibles de nutrientes
Para una protección adicional durante el cultivo, considera usar una malla mosquitera ideal para proteger tus cultivos de insectos dañinos que pueden comprometer la absorción de nutrientes.
Cultivos Perennes
Para árboles frutales y arbustos:
- Aplica abonos de liberación lenta
- Concentra la fertilización en zonas radiculares
- Programa aplicaciones estacionales
En cultivos perennes que requieren protección durante todo el año, considera utilizar plástico para invernadero que protege tus plantas todo el año mientras optimiza las condiciones para la absorción de nutrientes.
Otras Tareas para Preparar la Tierra para Sembrar
Como señalamos en la introducción, el abonado del terreno es una de las tareas principales para preparar el terreno para sembrar pero no la única. A continuación repasamos rápidamente los pasos a seguir para preparar la tierra antes de la siembra:
Secuencia Completa de Preparación
Identificar el terreno en el que vas sembrar: Es importante conocer las características del suelo para saber qué necesita. Realiza análisis de pH, textura y contenido de materia orgánica.
Eliminar las malas hierbas: Antes de realizar cualquier otro tipo de labor en tu terreno es fundamental eliminar las malas hierbas porque estas pueden entrar en conflicto con el resto de plantas por los recursos y el agua. Para un control efectivo a largo plazo, las mallas antihierba proporcionan control efectivo de malas hierbas, evitando que compitan con tus cultivos por los nutrientes del abono aplicado.
Airear la tierra: Se debe cavar alrededor de unos 20/25 centímetros de superficie, retirando toda la tierra y removiéndola. Es recomendable hacerlo con la tierra húmeda para facilitar la tarea. Puedes aprovechar este momento para añadir fertilizantes.
Allanar el terreno: Una vez que el terreno está aireado y fertilizado puedes empezar a allanarlo o nivelarlo para lograr un aspecto fino y unificado.
Abonar y enriquecer la tierra: Este es el último paso antes de la siembra. En los puntos anteriores ya hemos visto cómo se hace este proceso fundamental.
Control de Calidad del Suelo
Antes de la siembra final, verifica:
- Textura adecuada: Ni muy compacta ni demasiado suelta
- Humedad óptima: Húmeda pero no encharcada
- Temperatura del suelo: Entre 15-20°C para la mayoría de cultivos
- Ausencia de terrones: Superficie uniforme y nivelada
Errores Comunes al Abonar la Tierra
Evita estos errores frecuentes en el proceso de cómo abonar la tierra:
Sobreabonado
Síntomas: Crecimiento excesivo de follaje, retraso en floración, mayor susceptibilidad a plagas Solución: Reduce las dosis y aumenta la frecuencia de aplicaciones pequeñas
Abonado en Época Incorrecta
Error: Aplicar fertilizantes nitrogenados antes de heladas Consecuencia: Crecimiento tardío vulnerable al frío Corrección: Programa el abonado según el ciclo estacional
Mezcla Incorrecta de Fertilizantes
Problema: Combinar fertilizantes incompatibles Resultado: Pérdida de nutrientes o bloqueo de absorción Prevención: Consulta tablas de compatibilidad antes de mezclar
Beneficios a Largo Plazo del Abonado Correcto
Un programa bien ejecutado de cómo fertilizar la tierra proporciona beneficios duraderos:
Mejora de la Estructura del Suelo
- Mayor capacidad de retención de agua
- Mejor aireación y drenaje
- Reducción de la erosión
- Incremento de la actividad microbiana
Aumento de la Productividad
- Mayor rendimiento por metro cuadrado
- Mejor calidad nutricional de los frutos
- Resistencia mejorada a enfermedades
- Ciclos de cultivo más predecibles
Sostenibilidad Ambiental
- Reducción de la necesidad de pesticidas
- Menor impacto en aguas subterráneas
- Conservación de la biodiversidad del suelo
- Contribución al secuestro de carbono
Recuerda que en Sistemas Hortícolas Almería podrás encontrar todos los productos que necesitas para el día a día en tu huerto e invernadero. ¡Echa un vistazo y descubre todas nuestras propuestas!